✅ Перевірена відповідь на це питання доступна нижче. Наші рішення, перевірені спільнотою, допомагають краще зрозуміти матеріал.
CASO: Paolo Macchiarini era un cirujano torácico con una reputación brillante en el mundo de la medicina regenerativa. Su trabajo prometía revolucionar los trasplantes de tráquea utilizando estructuras sintéticas recubiertas con células madre. Pero lo que empezó como una visión futurista terminó en tragedia.
En 2010, Macchiarini fue contratado por el prestigioso “Karolinska Institutet”, en Suecia, una institución vinculada al Nobel de Medicina. Presentado como un pionero en su campo, consiguió el respaldo para realizar trasplantes de tráquea artificial en humanos, algo que, hasta entonces, solo se había probado en animales. Su método consistía en implantar una estructura de polímero que, supuestamente, se integraría perfectamente en el cuerpo con la ayuda de células madre del paciente.
El mundo de la medicina celebraba sus avances. En 2011, realizó su primer trasplante en un paciente que sufría de una grave obstrucción traqueal. Las primeras noticias fueron alentadoras: el paciente parecía recuperarse, y Macchiarini era visto como un genio capaz de cambiar la medicina para siempre.
Sin embargo, el sueño pronto comenzó a desmoronarse. En los siguientes años, varios pacientes operados por él sufrieron complicaciones severas. La tráquea sintética, lejos de integrarse al cuerpo, comenzó a deteriorarse, generando infecciones y daños internos. Algunos pacientes fallecieron, mientras otros quedaron con secuelas irreversibles.
Varios colegas del Karolinska Institute comenzaron a dudar de sus estudios y resultados. A lo largo de su investigación, Macchiarini había publicado artículos científicos que parecían exagerar los éxitos de sus cirugías y ocultaban los efectos adversos. Además, colegas del Instituto Karolinska de Suecia, preocupados, sospecharon posteriormente que el Dr. Macchiarini se había saltado una parte vital del proceso de investigación médica: señalaron una grave falta de datos o pruebas que demostraran que el Dr. Macchiarini había probado sus tubos de plástico en animales (con resultados positivos) antes de pasar a humanos.
Entre 2014 y 2016, la verdad comenzó a salir a la luz. Se descubrió que algunos de sus artículos contenían datos manipulados y que las evidencias sobre la eficacia de los trasplantes eran muy débiles. Además, surgieron acusaciones de que había operado a pacientes sin seguir protocolos éticos adecuados, poniendo vidas en peligro por procedimientos que aún no estaban completamente probados.
En 2016, el “Karolinska Institutet” lo despidió y comenzaron investigaciones judiciales. En 2022, fue condenado por causar daños corporales graves a pacientes, aunque en un principio recibió una sentencia suspendida. Un año después, en 2023, su pena fue aumentada a dos años y seis meses de prisión.
El caso de Macchiarini fue un golpe duro para la comunidad médica. No solo por los daños físicos y emocionales a los pacientes, sino porque expuso las fallas en el sistema de supervisión científica. Su historia llevó a un escrutinio más riguroso en el mundo de la cirugía experimental y generó cambios en la ética médica y las regulaciones para estudios clínicos.
(FUENTES: https://news.ki.se/news-archive/the-macchiarini-case-timeline
Qualifications portfolio for teachers and researchers at Karolinska Institutet" (PDF). circare.org. Retrieved 11 September 2023.
https://www.cosmopolitan.com/uk/reports/a46036499/bad-surgeon-dr-paolo-macchiarini-now/).
¿A qué tipo de circunstancia corresponde el hecho que “varios pacientes operados por él [Macchiarini] sufrieron complicaciones severas: la tráquea sintética, lejos de integrarse al cuerpo, comenzó a deteriorarse, generando infecciones y daños internos”
Отримайте необмежений доступ до відповідей на екзаменаційні питання - встановіть розширення Crowdly зараз!