Definir endpoints que permiten a los clientes enviar solicitudes y recibir respuestas a través de rutas específicas.

Gestionar la comunicación entre el servidor y el cliente, pero solo para operaciones de lectura de datos.

Manejar rutas en el servidor, pero sin la capacidad de procesar solicitudes o enviar respuestas.

Definir puntos de acceso que solo permiten a los servidores internos intercambiar datos sin interacción externa.